viernes, 28 de octubre de 2011

Hoy en clase

Hace mucho que no escribo pero no porque no quiera. Quiero escribir, escribir me ayuda a concentrarme y a aclarar mis ideas, es mi vía de escape ante la realidad y la manera que tengo de poder expresar todo lo que siento.

Pero me duele la mano, ni siquiera la doctora es capaz de explicarme el motivo, sin embargo me ha dicho que con unas cuantas pruebas más sabrá si me operan o no.

Eso es bueno, aunque no quería escribir sobre eso. Quería escribir sobre hoy en clase.

Las clases cada vez son más el vivo reflejo de la desesperación de la gente. Y de la hipocresía, pero no vamos a hablar de hipocresía.

Le debo un libro a una chica desde hace una semana, pero ese tampoco es el tema.

Hoy un compañero del año pasado se ha acercado para decirme "anda que casualidad estábamos habland de ti porque me acordé al ver tu tuenti", luego me han dado un abrazo.

Un compañero de clase se ha puesto a moverse de manera ridícula mientras me miraba sólo para que me riera.

Se ha hablado en la conducta en sus contextos sobre depresión, cáncer y suicidios de gente joven. Hijas que abandonan una familia porque no soportan más lo que les ocurren y piensan que la muerte es la solución a sus problemas.

Hoy me han dado un abrazo mis antiguos compañeros de clase.

Hoy tengo ganas de escribir pese al dolor. Cualquier dolor.

3 comentarios:

tita hellen dijo...

Los abrazos sustituyen a cualquier pastilla, los abrazos de verdad, los de corazón. Besotes

Sheila dijo...

Me sentí bien, pero porque se acordaron de mí y yo pensé *.* se acuerdan de mí ¡!

Rolando José dijo...

El problema es cuando te recuerda la gente que NO deseas que te recuerde =)