lunes, 3 de diciembre de 2012

Expocómic 2012


¡Matemático!


 
Y aquí estamos un año más. Todos los años te prometes que será el último (al menos en lo que implica el disfraz) y sin embargo aquí estamos ¿motivos? Ni idea.

Este año ha sido intenso. Todo empezó complicado, los terribles sucesos ocurridos en el Madrid Arena dieron paso al cierre del “Palacio de Cristal” y a unos veinte días del evento ni se sabía dónde se iba a hacer, ni tan siquiera si se llevaría a cabo.

Lo que nos lleva a la semana pasada, donde se decidió que se haría en el Matadero de Madrid.

Sí, el Matadero es un lugar para hacer actividades, pero desde luego no sonaba apetecible.

 

¡Se ha formado un tapón! ¡Alto, alto! (“¡Código 9!”)


El edificio principal tenía capacidad para 2000 personas, para todos los que han ido alguna vez a este evento saben que la afluencia de gente es cambiante y va saliendo y entrando con facilidad. Para los vigilantes que contrataron la AEAC (Asociación Española de Amigos del Cómic) no. Contaban los que entraban y no los que salían, lo que provocó quejas, gritos, frases absurdas como la de este título por el simple hecho de que unos chicos se quedaron hablando en la entrada, etc.

El aforo máximo fue el cáncer del evento, se formaron dos colas (la de comprar la entrada, que parecía más bien la de un parque de atracciones, y la de entrar al edificio principal que daba a la calle y el frío terminaba pasando factura).

También hay que hacer una mención a la mala organización de los eventos. Las exposiciones estaban mal posicionadas o mal señalizadas y ni siquiera a día de hoy sé dónde demonios quedaba el escenario. Quiero creer no obstante que se debe al preparar todo en menos de una semana, cualquiera tendría los mismos problemas.

 

¡La Princesa Chicle! ¡La máquina de Finn! ¡La amiga muerta!


Como siempre lo mejor del evento fueron la compañía y los disfraces. Las largas colas y el frío merecieron la pena por las risas, las fotos y las anécdotas. Los niños señalando los disfraces. La gente haciéndose fotos…

Poco más que decir, una servidora se lleva sonrisas, una entrada que derivó en un cómic que tal vez me lea, un puñado de Dylan Dog y la idea en la mente de preparar el próximo evento, el Expomanga… ¿Por qué no?

2 comentarios:

Unknown dijo...

¡¡¡Fue verdaderamente divertido!!!
Con días como los de ayer es normal que uno nunca cumpla su palabra de "esta será la última vez" xD

Marta Timón dijo...

Me hizo ilusión verte, aunque sólo fuese un segundito ^^