miércoles, 29 de agosto de 2012

Revisionando en el pueblo


 

Varios días en el pueblo te pueden dar para muchas cosas, a mí sobre todo me sirve para estudiar, pero la mayoría del tiempo libre lo uso para leer, algún libro que tengo por ahí (este año le tocó al “Haiku de las palabras perdidas” y a “Vampiria”, un tomo recopilatorio de historias del mito vampírico desde principios del XIX a principios del XX, un siglo entero con narraciones de Lovecraft o Poe).

Sin embargo no es eso de lo que quería hablar, resulta que ahí, bonita, mirándome cada mañana cuando me despierto está una estantería en su mayoría llena de mangas (llena de otras cosas pero sobre todo de japonesadas, qué queréis, tuve una adolescencia), me llama. Y claro una que no es de piedra y que lo más interesante que hace aquí es recibir cartas del mundo exterior, llamar cuando una raya de cobertura se cruza en su camino y mirar los girasoles nuevos que han puesto en el campo donde no había nada desde que desaparecieron las vacas… Pues nada, que le eché un vistazo a las obras que tenía. Algunas mejores, otras peores y algunas cuya opinión cambió bastante con un segundo visionado y un punto de vista, siendo sinceros, un pelín más maduro.

Pues esas son las entradas que iré poniendo a partir de ahora. Espero no aburrir a unos y a otros. Ha sido un verano largo.

2 comentarios:

tita hellen dijo...

Pues la verdad, se te agradeceran las sugerencias. Me fio de tu criterio. Que estudies poco y te cunda una jartá. Besotes

Sheila dijo...

Gracias, la verdad es que son cosas bastante antiguas, pero si te interesa alguna siempre te la puedo dejar :)

Muchos besos