Expocómic 2010

Tras varios días sin actualizar y con las ganas aún y el recuerdo del último expocómic actualizo esta entrada.
La verdad es que este año pintaba esperanzador, la idea de cambiar el lugar y trasladar el evento al Pabellón de Cristal sin sufrir cambios en el bolsillo era algo que muchos esperábamos desde hace años y que pocos nos creimos hasta que estuvimos allí mismo.
Lo que más me llamó la atención al entrar fue la falta de colas, no había ninguna clase de cola ni la hubo al menos mientras yo estuve allí el sábado.
Los más pequeños se entremezclaban con los mayores, padres e hijos, abuelos y nietos, amigos y conocidos se reunían haciendo que el salón se fuera convirtiendo en un lugar variopinto, que si bien al principio la presencia de frokos (frikis horribles), de edades comprendidas entre los 14-23 años, hacía que te sintieras un poco fuera de lugar y perdido, esta multiculturalidad de la que he hablado al principio te recordaba que todo el mundo leía cómics. Como tú.
Las colas para las firmas (nunca entenderé eso, lo normal sería ir directamente a la firm,a de cómics y no comerte antes una cola para coger papelito que parece que estamos en el mercado y encima puede que al final ni vaya pero bueno), nos recibían a la entrada, al igual que un montón de muchachos y muchachos voluntarios (vamos de los que trabajan allí), que nos pedían que nos mantuviéramos a un lado de la escalera o nos moviéramos pero que no nos quedáramos con cara de pasmarotes contemplando la escena.
Casi sin creérmelo dimos vueltas y vueltas al lugar con más ventilación que nunca, más espacio entre los stands, más stands y en general un ambiente que si debería de ser el nomral resultaba raro por lo obvio: Nos estaban vendiendo lo de siempre, pero en un sitio más grande y con más espacio y lo agradecimos, vaya que si lo hicimos.
No os miento si os digo que no llegué a ver todos los stands y que me hubiera gustado haber pasado más tiempo.
Pero niños, no todo es positivo y mi crónica del susodicho día tiene también pegas:

-La primera y más importante el espacio para sentarse: Con cierta dificultad entiendo que no podamos comer en el recinto, pero no veo normal que no podamos sentarnos dentro, algunos diréis "¡Eh, yo me senté!" Shhh, dejadme explicar primero.
Había suficiente espacio para los stands, asociaciones, fanzines, videoconsolas... Incluso para el Cthulhu gigante promocionando la peli de "La herencia de Valdemar II", pero si querías sentarte las "Amables señoritas" te indicaban que el único lugar era donde las sillas del escenario.
MAL, MUY MAL. Hubo autores, buenos y malos. Hubos mesas redondas y charlas de todo tipo. Y me parece un insulto hacia la persona del público estar delante de sus narices mientras hablas sobre lo cansada que estás o la fiebre que tienes. Gente de la Asociación Española de Amigos del Cómic, yo como autora me sentiría insultada, pero como visitante necesito descansar y obviamente no voy a salir a la calle a pillar frío mientras llueve. Hay que solucionar esto.

-Lo segundo ACTIVIDADES, harta de repetirlo año tras año, lo que distingue a un salón de un día de compras por la capital tiene que ser la actividad: Juegos, sorteos, concursos... ¡Más vidilla! Las asociaciones hacen lo que pueden, pero la falta de publicidad y la gente que no mira más allá de sus narices lo pone complicado. Este año Aarón quería participar en una actividad y pudimos hacerlo en el "1, 2, 3... Frikea otra vez" Donde Aarón me ganó (por poco ¿eh?). Gracias a la asociación Sensei por dejarnos participar y ser tan simpáticos a pesar de los problemas. (Gracias también por el vale de Aarón, quye lo descambiamos por un bonito manga allí en Getafe).

-Tercero, que se haya convertido en la putita del EXPOMANGA. Cierto que el manga y más en estos últimos años, ha tenido un considerable peso en la industria del cómic, pero estamos hablando del EXPOCÓMIC y no del Expomanga y por tanto dá un poco de vergüenza no poder conseguir apenas cómic americano (como siempre ya no hablemos del europeo) y que el manga tenga su propio día el domingo, ahí un día para él solito. Si nnos fijamos en los porcentajes del último año las ventas en manga han descendido bastante, así que opino que habría que desarrollar de otra manera el día del manga.

Y en fin, poco más que decir, como siempre lo mejor la compañía. Que sin la gente supongo que ni trasladaría allí xD.

Espero haber sido objetiva con el evento (el hecho de que sólo fuera el sábado y que apenas pudiera hablar y tuviera fiebre no ha empañado para nada mi visión del lugar, en serio si no me hubiera ido mucho antes).

Esperando para el expomanga 2011. (No al Japan Weekend, que va a ir su abuela, que eso ni es salón ni es ná).

Gracias por leer hasta aquí.